
Arrancamos PRODEL en 2015 con el firme propósito de que los profesionales implicados consigan lo mejor de sí mismos, aumentando su autoconocimiento, identificando sus áreas de mejora y planteando distintas actividades con las que acompañarles en el proceso.
Tras una primera fase de diagnóstico de sus competencias a trabajar, mediante la realización de unas pruebas de evaluación, definimos un Plan de Desarrollo Individual (PDI).
Es en ese momento cuando, por medio de distintas vías, como formación, mentoring, sesiones con dirección o coaching, se comienza el trabajo de campo con cada uno de los participantes del programa.
En INTEGRA creemos que nuestro personal es, sin duda, el motor de la compañía, por lo que consideramos imprescindible dotarlo de recursos, de manera que los responsables de cada área establezcan procesos de trabajo y consigan equipos integrados, motivados, comprometidos y eficientes.